tag:blogger.com,1999:blog-7307712146296904588.post4490074487007857102..comments2023-09-17T13:17:19.663+02:00Comments on Toma el Timón: CLÁSICOSTimonerahttp://www.blogger.com/profile/03642344848784660464noreply@blogger.comBlogger2125tag:blogger.com,1999:blog-7307712146296904588.post-62177936475157258622016-03-06T10:42:08.571+01:002016-03-06T10:42:08.571+01:00Atticus: Hombre, ¡no te ofendas por lo de las gafa...<b>Atticus:</b> Hombre, ¡no te ofendas por lo de las gafas! ¿Y la sensación de saber cómo eres sin gafas tras muchos años de convivencia contigo misma?<br /><br />Historias agridulces (dulceagrias, por ese órden) las tuyas. Pero, por lo que veo, se podría escribir un libro con microhistorias sobre paraguas. Estoy segura que todo el mundo tiene alguna que contar.<br /><br />No le cojas demasiado apego a tu paraguas Peugeot, los paraguas se saben cuando vienen, pero no cuando se van.Timonerahttps://www.blogger.com/profile/03642344848784660464noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7307712146296904588.post-86873434212866377942016-03-05T13:17:10.502+01:002016-03-05T13:17:10.502+01:00Creo que este va a ser mi último comentario aquí. ...Creo que este va a ser mi último comentario aquí. Porque eres una renegada de la miopía, por eso. Con lo chulas que son las gafas... Creo que si me levantase un día viendo bien, me compraría unas sin graduación. Nada, que partimos peras.<br /><br />Pero antes dos historias de paraguaas.<br /><br />Hace unos años, una hermosa mujer me regalo parte de su tiempo y algo de su amor. Una vez fui a su casa, llovía. Cuando me fui al día siguiente lucía el sol y me dejé olvidado el paraguas. Pocos días después consideró oportuno darme el finiquito. Lo que no me dio es el paraguas. Era amarillo mostaza, precioso. Creo que lo echo de menos más que a ella.<br /><br />Segunda historia. A principio de curso fui a trabajar un día de lluvia. Llevé mi paraguas rojo. Al salir, no estaba. Alguien se lo había llevado confundido con el suyo, que estaba allí, rojo también. Al día siguiente lo comenté y una compañera me dijo esto: "Ah, sí, me lo llevé, yo, gracias por devolver el mío. Pero verás, el tuyo se rompió". Y cogió su paraguas rojo y yo me quedé con cara... de gilipollas.<br /><br />Ahora sólo tengo uno. Es azul. Bueno, en el coche tengo otro. Me lo regaló Peugeot un día que me presentaron una factura que tardaría tres semanas de trabajo en pagar. Atticushttps://www.blogger.com/profile/03047381867282414410noreply@blogger.com