Ya se que no descubro nada nuevo si os hablo del inmenso abismo que es Internet. De la cantidad de recursos, información y soluciones que tiene para cualquier persona: desde un niño –como mi sobri- que quiera ver Pocoyó insistentemente, hasta una abuelita que quiera aprender la receta del pollo a lo chilindrón –si es que todavía no la sabe-. Hay cursos para casi todo, maneras infinitas de autoaprender, de divertirse, de encontrar libros, música, de enterarnos de eventos… Cada vez estoy más convencida de que Internet tiene un genio dentro y que, cualquier cosa que le pidas, te da una salida.
Y claro, una clara aplicación del mundo interneterino es, cómo no, las redes sociales… Aunque inicialmente yo era una escéptica sobre las ventajas del
Facebook, hoy día, creo que aunque mal usado tiene muchas desventajas, se le puede dar un buen uso para, por ejemplo, mantener el contacto con la gente que no está cerca de ti, pedir ayuda, opinión, obtener información….
Otra característica de este gran mundo que es Internet es que somos nosotros lo que lo hacemos, lo amoldamos y lo transformamos, a veces nos falta saber como comunicarnos… Así que el otro día tuve ocasión de que un amigo me explicara los pros y contras del
Facebook frente a
Twitter (del que yo no sabía nada)… y me convenció tanto, que me he tirado a la piscina.
Desde ya Timonera tiene una cuenta de Twitter: @tomaeltimon Si, de momento ando un poco perdida, pero poco a poco aprenderé… Desde aquí os animo a que me visitéis por allí también, y ya puestos que me enseñéis un poco… Nos vemos –también- en otra dimensión.