Un hombre se propone la tarea de dibujar el mundo. A lo largo de los años, puebla un espacio de provincias, de reinos, de montañas, de bahías, de naves, de islas, de peces, de habitaciones, de instrumentos, de astros, de caballos y de personas. Poco antes de morir, descubre que ese paciente laberinto de líneas traza la imagen de su cara.
J.L Borges
El cero, ese numerito introducido probablemente por los árabes –aunque se cree que los Mayas, o los indios ya lo utilizaron años antes- se creó ante la necesidad de numerar la nada, de contar la ausencia, de resolver lo neutro, de asignar un valor a lo contrario de todo.
No se si os habéis fijado, pero hay tantísimas cosas que no podríamos hacer, decir, nombrar, recalcar sin ese numerito… - Quien no recuerda esos ceros peloteros con los que blandían sus amenazas la inmensa mayoría de los profesores…- Y sin embargo, imaginad que un día desaparezca de vuestras vidas, ya no esté allí. Ese día os daríais cuenta de lo que vale un peine porque… es lo que me ha pasado a mí.
Hace unos días, tomando mi café-de-abrir-los-ojos, ocurrió un pequeño accidente… El café –visto y no visto- pasó de estar en mi garganta al teclado de mi ordenador -ahora, despejarme, me despeje rápidamente-… Tras hacer una operación de urgencia a mi teclado, conseguí salvar todas las teclas menos… el Cero. Si, ese numerito marginado por todos, sobre todo si es de izquierdas…se fue para siempre de mi teclado, -las injusticias acontecidas con el son innumerables, fue excluido de muchas comunidades hasta de la famosa cancioncita de Barrio Sesamo donde el 6 era el Rey- .
El caso es que no sabéis cuanto lo valoro ahora mismo… Es análogo a comenzar a valorar tus piernas tras haberte hecho un esguince… Y es que no sabéis lo popular que es cerito… Está hasta en la sopa. Y lo que pasaba desapercibido… Tratadlo bien, cualquier día os puede abandonar y deseareis no haberlo ofendido. ¡¡¡Vuelve Ceroooooo!!! A partir de ahora, te trataré como te mereces.. Snifff…
En estas páginas hay espacio para la reflexión, las bitácoras, los viajes estelares y los terrenales, las experiencias compartidas y todos aquellos instantes que hacen cada sitio, cada momento de nuestra vida, un lugar inolvidable. Bienvenid@.
We do not grow absolutely, chronologically. We grow sometimes in one dimension, and not in another; unevenly. We grow partially. We are relative. We are mature in one realm, childish in another. The past, present, and future mingle and pull us backward, forward, or fix us in the present. We are made up of layers, cells, constellations.
Anaïs Nin
No hay comentarios:
Publicar un comentario