lunes, 29 de marzo de 2010

VIAJE DE CUMPLEAÑOS



Vas a volar por mundos infinitos,
mundos desiertos y planetas habitados.
Una larga travesía por viejas rutas y espacios vírgenes,
hacia destinos transgalácticos y mares interiores.
Toda la vida por delante. Por detrás, el libro.

En tu alegre peripecia explorarás poco a poco
tus fronteras y el infinito poliverso,
cruzarás las calles del pueblo
y tratarás con cien mujeres y con unos cuantos hombres
tan a fondo como os sea deseable.
Harás también escalas de soledad total,
tiempo para contar los lados de un triángulo
y trazar en la frente mapas de laberintos desarmados.

Admiro tu valor y no te envidio, o tal vez sí.
Al fin y al cabo, este viaje es el regalo de cumpleaños
que te hago para que descubras paso a paso
cosas nuevas u olvidadas, secuencias, vibraciones,
decimales tartamudos de la cifra.
Para que a la vuelta me cuentes lo que quieras, por ejemplo,
que todo da vueltas porque todo es redondo,
que amar es psicodélico
o que sabes un secreto que me hará libre…

Anónimo

miércoles, 24 de marzo de 2010

CAPITÁN TRUENO

Ayer asistí a uno de mis diez mejores conciertos de mi vida. Así, sin lugar a dudas. Devendra Banhart and The Grogs en esta ciudad genial que tengo aquí al ladito: San Francisco.



Desde los primeros acordes de Baby con los que se abrieron estas dos horas de lujo, el público nos hipnotizamos con esa conjunción de voz genuina –empeñada en ser diferente a cualquier cosa que hayas escuchado nunca- que incluso suena mejor en directo si cabe. Increíble también el momento en que Devendra se sentó solo con la guitarra –y después al piano- y nos ofreció versiones acústicas de algunas de sus joyas. No sólo eso, la conjunción de los músicos entre sí, su capacidad de improvisación, el buen rollo que desprendían y el talento de cada uno de ellos –se iban pasando las sonrisas, los instrumentos y el micrófono de uno a otro-, bordaron la cantidad de canciones con sabor original, bordadas con una excelente armonía y una tensión orgásmica en el ambiente. Dos horas de deleite.

Si además le sumamos la excelente telonera que tuvo, Dorothy and The Originals, una voz inimaginable con el solo aderezo de un ordenador que le hacía los coros, con reminiscencias de un Antony and The Johnsons en femenino- y su fabulosa interpretación de Bad Girl junto con Devendra las dos horas de perfección se convirtieron en tres horas memorables para la eternidad.

Espero haberos inyectado el virus de Devendra en el cuerpo aquellos que no lo teníais. Os advierto que no hay vacuna que valga. Sólo la cara de felicidad que se te queda cuando acabas cantando a grito pelado canciones como Carmencita, Long haired child o I feel just like a child como bis agraciado. Si necesitáis discos o grabaciones de este momento histórico, pedid y se os dará.

domingo, 21 de marzo de 2010

AMARILLOS

Supongo que todos hemos experimentado la inmediata conexión que se da con una determinada persona que acabas de conocer. No son necesarios años, ni conversaciones metafísicas, ni conocer todos los detalles de su vida, simplemente basta con que las esencias se reconozcan.

Y no me estoy refiriendo a conexión sexual o de amor, ni necesariamente de amistad –aunque por supuesto hay una alta correlación-, es algo que va más allá, que es independiente de la cultura, sexo o nacionalidad. Es reconocer la certeza de que esa persona –parecida o no a ti- se acopla perfectamente a quien eres, y conoce los rincones más recónditos de ti. Y no, no es comparable a nada parecido. Es inconfundible.

Son personas con las que su presencia basta para estar a gusto, relajarse y disfrutar con todos los sentidos. La descripción más exacta de lo que trato de explicar, la encontré en ese maravilloso libro de Albert Espinosa llamado El Mundo Amarillo. Básicamente esta sería la definición de los Amarillos:

Hay amigos que te dan amistad, hay amores que te dan pasión, sexo o amor, y finalmente hay amarillos.

Y ésta una breve descripción.

La belleza lleva camuflada la marca amarilla. ¿No te ha pasado nunca que veas entre una multitud a alguien a quien no puedes quitarle el ojo? Pero no tiene nada que ver con la sexualidad, no querrías acostarte con esa persona sino que llena un vacío en tu mundo. Crees que te comprende, que podríais ser amigos, que hay una energía en común. Luego la persona desaparece y la olvidas. No perdura mucho en tu memoria, es como si su marcha no te creara tristeza, fuera algo que se acepta.

Cuando, estos seres particulares de cada uno además, pasan a aparecer en tu vida con frecuencia, nos fortalecemos, nutrimos y crecemos mutuamente. Creo que estas personas son necesarias en nuestras vidas y su ausencia puede producir lesiones serias en nuestra suerte. Así que ya sabéis, el próximo día que os encontréis un Amarillo, exprimirlo todo lo que podáis. Desde aquí un abrazo a todos mis Amarillos particulares.

jueves, 18 de marzo de 2010

TODO O NADA



Indescifrada y sola, sé que puedo
ser en la vaga noche una plegaria
de bronce o la sentencia en que se cifra
el sabor de una vida o de una tarde
o el sueño de Chuang Tzu, que ya conoces
o una fecha trivial o una parábola
o un vasto emperador, hoy unas sílabas,
o el universo o tu secreto nombre
o aquel enigma que indagaste en vano
a lo largo del tiempo y de sus días.
Puedo ser todo. Déjame en la sombra

'Signos'. Jorge Luis Borges

domingo, 14 de marzo de 2010

GOOD DAYS

Después de haber pasado un par de días rodeada de gente llena de vida, sana, simple, positiva, en ese San Francisco luminoso y vibrante, con guarnición de música excelente, buenas conversaciones y una gran recapitulación de risas…

Y después de habernos atragantado con cada milímetro del fabuloso concierto que Dianne Reeves –la gran gran Dianne- nos ofreció al combinar esa voz increíble –con o sin micrófono, improvisando o no- con esa compenetración inigualable con el resto del grupo, pintando esas sonrisas circulares en todos nuestros poros…

… No queda más remedio que aceptar esta canción como himno oficial y proclamar al mundo que



Today will be a good good good good day.
I´m gonna make it that way.


Fantástica filosofía. Cualquier día puede ser estupendo. Simplemente consiste en ponerse a ello.

jueves, 11 de marzo de 2010

PRIMAVERA II

Ya se que debemos ser el único lugar ahora mismo… Pero por aquí ya se asoma el calorcito. Y con ella, la luz, las flores por doquier, los buenos amigos, los reencuentros y las risas … Atrás queda la oscuridad, el frío y el derroche de minutos preciosos no remunerados…

Aquí hoy, queda inaugurada mi primavera. Muchas gracias a todos lo que siempre ayudáis a que aparezca.



La alegría sobreviene después a las ausencias, al fin de las nostalgias. Si uno se reencuentra con lo amado y su revelación unánime, es lógico que el gozo nos abrace y a uno le vienen ganas de cantar. Aunque no tenga voz, aunque esté ronco de pasadas angustias. Después de todo la alegría es un préstamo, no nos pertenece. Es una locurita, un premio pasajero, pero la disfrutamos como si fuera propia, como un lucro, como una primavera de la vida. Ella se aferra al tiempo, arrastra su poquito de la infancia y se mete soplando en la vejez. Semana tras semana, año tras año, la alegría va llenando vacíos.

Mario Benedetti. Vivir adrede.

domingo, 7 de marzo de 2010

EXAMEN SORPRESA

Cómo hubieran cambiado nuestras aburridas clases de historia y ciencias naturales si nos las hubieran explicado de esta manera, ¿verdad? Cuatro horas semanales durante los ocho años de la E.G.B… en menos de tres minutos y medio.



Si ya lo decía María –un petó desde aquí- que cuando le hicieron saltar un curso -de tercero a cuarto de E.G.B-, lo único nuevo que tuvo que aprender fueron… ¡los números romanos!.

Deberíamos plantearnos muy seriamente las infinitas posibilidades que el potencial de un niño tiene y como las hacemos desaprovechar en la mayoría de los casos a causa de la monotonía, la poca motivación y la falta de imaginación de los 'educadores'.

viernes, 5 de marzo de 2010

VERSIÓN ORIGINAL

Resulta que me he puesto a buscar La tercera expedición de las Crónicas Marcianas de Ray Bradbury (para aquellos que quieran leerla, lo pueden hacer aquí), para contaros los escalofríos que me provocó aquel capítulo y lo genial de esta novela, y parece que… No soy la única que opina esto. Internet está lleno de alabanzas hacia esta sección e incluso Jorge Luis Borges describió este capítulo como la historia más alarmante de este volumen.

Esto me ha hecho pensar que en el fondo, somos muy predecibles, que tarde o temprano todos evolucionamos demasiado similarmente… De hecho, los estímulos que nos dispara nuestra sociedad son los mismos para todos –música, publicidad, educación, medios de comunicación-, y nuestras condiciones iniciales no son tan dispares… Por lo tanto, y según esto, las cosas más aparentemente subjetivas -belleza, miedo, placer…- acaban siendo objetivas y cuantificables, aunque de esto ya hablamos hace un tiempo.

Y de la misma manera, tarde o temprano, cometemos los mismos errores que otros años antes, por mucho que nos advirtieran o nos aconsejaran otros que ya lo habían experimentado. Sólo aprendemos a base de vivir las experiencias en nuestro propio cuerpo. Pero desde luego, ahí radica el carácter de éxito de nuestros errores, de la lección que recibimos…

Parece que la conclusión que sugiere todo esto es que tendemos a una homogeneidad soporífera, que no puede existir ente alguno que realmente desafine respecto la bendita campana de Gauss. Sin embargo, las evidencias demuestran lo contrario. Conozco un sinfín de gente auténtica a más no poder –y vosotros sabéis quienes sois, un beso desde aquí- gente que ante la amenaza de la uniformidad se ha moldeado, ha tratado de vencer los convencionalismos, ha optado por escoger las bifurcaciones hacia lo desconocido y por abrir su mente ante nuevas ideas…

Y eso ha hecho, que aunque si bien todos tenemos un legado de tópicos respecto nuestra generación, cultura, país, sexo o físico, también mucho de nosotros hemos luchado por no conformarnos y por eso, cerrando el círculo, fue posible que genios genuinos como Bradbury escribieran la increíbles Crónicas Marcianas y que talentos inconmensurables de la talla de Borges coincidan en su opinión sobre esta obra maestra con una gran mayoría.

martes, 2 de marzo de 2010

CERO GRADOS CELSIUS

Pim pam pum, ya estamos en marzo. Ya está otra vez el tiempo saltándose las normas y corriendo más de la cuenta… Aunque de vez en cuando, no viene mal un poco de saltos con pértiga…

El caso es que febrero acabó con un grande entre los grandes, Joshua Bell –el hombre que comprobó por si mismo que el talento no es sinónimo de reconocimiento- y su violín, nos mantuvieron en vilo durante dos horas mágicas, en las que a más de uno, se nos olvidó respirar. En mi caso particular, con una sonata de Saint-Saens y otra de Ravel indescriptibles. Maestros ejecutados por maestros.



Resulta gratificante comprobar que hay personas en este mundo que eligieron bien su profesión, y se dedicaron a aquello que no sólo saben hacer mejor, sino que les hace felices –no había más que verlo- y provocan la congelación del tiempo compartido.

Esa noche había en el aire un olor a tiempo. La idea era divertida. ¿Qué olor tenía el tiempo? El olor del polvo, los relojes, la gente. ¿Y qué sonido tenía el tiempo? Un sonido de agua en una cueva y unas voces que lloraban y una voz muy triste, y unas gotas sucias, y un sonido de lluvia. Así era cómo olía el tiempo, como sonaba y qué parecía. Y esta noche, casi se podía tocar el tiempo.

Ray Bradbury. Crónicas Marcianas