Es importante estar entrenando para saber coger el tren en marcha, para saber reaccionar ante las oportunidades, puesto que éstas, casi siempre, se nos presentan en los momentos más insospechados.
Sino disponemos de agilidad para dar el salto y subirnos, o nos aterramos antes la posibilidad de caernos, o simplemente, preferimos esperar al siguiente –que, ¿porqué no?, seguro que pasa-, nos podemos encontrar recluidos en la más desapacible de las poblaciones, atrapados en una vida que no queremos, pagando una factura interminable.
Porque el mundo ya no importa si uno no tiene fuerzas para seguir eligiendo algo verdadero, si uno se ordena como un cajón de la cómoda y te pone a ti de un lado, el domingo del otro, el amor de madre, el juguete nuevo, la Gare de Montparnasse, el tren, la visita que hay que hacer.
Rayuela. Julio Cortazar
Adiós
Hace 4 años
Cuanta razón tiene nuestro Cortázar, eh? Supongo que hablarás en general, porque tú eres incapaz de llevar una vida no-verdadera. Se te añora!!!!
ResponderEliminarMiguel: ¡¡Maikel!!! ¡Qué ilusión leerte! ¡Cuanto tiempo! Esto era un recordatorio para que no se nos olvide... ¡Yo también te echo de menos! ¡Te escribo! Un besazo
ResponderEliminar