Adiós
Hace 5 años
Un hombre se propone la tarea de dibujar el mundo. A lo largo de los años, puebla un espacio de provincias, de reinos, de montañas, de bahías, de naves, de islas, de peces, de habitaciones, de instrumentos, de astros, de caballos y de personas. Poco antes de morir, descubre que ese paciente laberinto de líneas traza la imagen de su cara. J.L Borges

Ya se vislumbra en el horizonte… Vacaciones, descanso, amigos, juergas, risas, abrazos, recuerdos, calles antiguas, acentos conocidos… Me parece increíble que en unas horitas esté sobrevolando este enorme país rumbo a esa tierra que me ha acogido durante años y que ahora simplemente visito. Una no sabe muy bien quién es ya, a donde pertenece cuando decide exiliarse… Al final todas las costumbres se hacen ajenas y extrañas. Las distancias se hacen estrechas y gigantes. Pero entre toda esta dualidad marañosa y todo este caos, siempre queda la certidumbre de que beberemos el tiempo en forma de cafés larguísimos, arrumacos repartidos, conversaciones despiadadas y brindis chispeantes. Chin, chin. Allá vamos.
Primero aparece una sola, premonitoria, señalizadora, amenazante. Te avisa que se aproxima marejada, que se va a desencadenar un caos importante, un primer encontronazo con responsabilidades demasiado grandes, subidas y bajadas, esfuerzo y cariño rebanados a partes iguales.